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La Vall Fosca consigue la acreditación Biosphere

La Vall Fosca ha obtenido este mes de enero la certificación Biosphere como destino turístico y centro de información. Se trata de un certificado de alcance mundial que acredita que se trabaja para desarrollar iniciativas turísticas de forma sostenible, a la vez que se fomenta la singularidad social, cultural y local. 

Actualmente la Vall Fosca, el Epicentro, centro de visitantes del Geoparc, y el Hotel Terradets, son los únicos en tener la certificación Biosphere en el Pallars Jussà. Otros destinos, equipamientos o empresas como el Museo Hidroeléctrico de Capdella, el Hotel Arturo o la Oficina de Turismo de La Pobla de Segur están en el proceso de conseguirla.

Esta certificación ha sido posible gracias al apoyo del Patronato de Turismo de la Diputación de Lleida, que ha facilitado la plataforma Biosphere Sustainable Lifestyle, que ayuda al sector a desarrollar planes de sostenibilidad personalizados mediante la selección de más de 400 actividades y acciones sostenibles, vinculadas con los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la Agenda 2030 de las Naciones Unidas.

Según la certificación Biosphere, los destinos deben cumplir los 17 objetivos de desarrollo sostenible (ODT) que la ONU aprobó en la Agenda 2030 sobre Turismo Sostenible. Los objetivos establecen que la erradicación de la pobreza debe ir de la mano de estrategias que fomenten el crecimiento económico y aborden una serie de necesidades sociales como la educación, la sanidad, la protección social y las perspectivas de empleo, a la vez que se combate el cambio climático y se protege al medio ambiente.

En el proceso de preparación de la certificación, Vall Fosca ha tenido que acreditar acciones que se llevan a cabo como por ejemplo: distribuir información sobre diferentes atracciones de interés turístico para evitar la masificación en ciertos puntos; realizar experiencias de aprendizaje en la naturaleza para los visitantes; colaborar con proyectos sociales como Alba Jussà; limpiar y mantener caminos como iniciativa de recuperación de patrimonio; utilizar fuentes de agua filtrada osmotizada; eliminar vasos y botellas de plástico; comprar y consumir productos y servicios de proximidad, etc.

También se valoran otros aspectos más internos de las organizaciones, como implantar políticas que garanticen la protección de los derechos laborales u ofrecer formación adecuada a las necesidades de los empleados.