Es el centro administrativo de la Vall Fosca. La población surge entre la montaña de los Cubilars y la Roca del Migdia.
A 800 m se encuentra la ermita románica de Sant Martí, auténtica joya de la que hoy en día sólo se conserva una torre con un ábside decorado.
Desde la Torre de Capdella sale el camino que llega hasta Mont-ros.